El gas de vertedero se produce mediante procesos biológicos anaeróbicos en el cuerpo del vertedero. Es una mezcla compuesta por la mitad de metano y dióxido de carbono, y una variedad de gases traza. Las fugas de gas de vertedero pueden poner en peligro o influir en las personas, la fauna y la flora, así como en los edificios y las instalaciones técnicas en el entorno de un vertedero. Además, el gas de los vertederos es una importante fuente de emisión de gases de efecto invernadero. Por lo tanto, el gas de vertedero debe recolectarse y utilizarse o tratarse. La norma describe el estado de la técnica en la utilización y tratamiento de gases de vertedero.