Se aplica a dispositivos portátiles compuestos por un enchufe, un dispositivo de corriente residual (RCD) y una o más tomas de corriente o una disposición para la conexión. No incorporan protección contra sobrecorriente. Están destinados a circuitos monofásicos para corrientes nominales no superiores a 16 A para tensiones nominales no superiores a 250 V ca, o para corrientes nominales no superiores a 32 A para tensiones nominales no superiores a 130 V ca a tierra.