Esta norma internacional describe un método de prueba que puede proporcionar una diferenciación preliminar entre materiales aislantes similares, con respecto a su resistencia al daño cuando se exponen a descargas de arco de alta tensión y baja corriente, que ocurren cerca de sus superficies. Las descargas provocan erosión y descomposición térmica y química localizada y, finalmente, se forma un camino conductor a través del material aislante. La severidad de las condiciones de prueba aumenta gradualmente: en las primeras etapas se interrumpe repetidamente una descarga de arco de baja corriente, mientras que en las etapas posteriores, la corriente del arco se aumenta en pasos sucesivos.