El grafito impregnado (también llamado grafito impermeable) es un material que se ha utilizado industrialmente durante los últimos 60 a 70 años. El uso industrial principal ha sido en la construcción de equipos de procesamiento químico, donde la excepcional resistencia a la corrosión y la alta conductividad térmica del grafito son particularmente ventajosas. Las aplicaciones típicas incluyen la fabricación de productos farmacéuticos y fertilizantes fosfatados, decapado de acero, procesamiento de compuestos orgánicos clorados, tratamiento de gases de combustión, producción y recuperación de HCI y H2SO4, además de la fabricación de productos químicos intermedios. El grafito impermeable utilizado para la construcción de recipientes a presión de grafito es un material compuesto que consiste en grafito en bruto impregnado con una resina mediante un ciclo de presión/calor estrictamente controlado.