Esta norma británica brinda recomendaciones y orientación para el tratamiento conservador de la madera para brindar protección contra el biodeterioro en ciertas situaciones de uso final específicas en el Reino Unido. Recomienda niveles de penetración y retención de conservantes, de las clases definidas en BS EN 351-1, para diferentes componentes de la madera y tiene en cuenta la durabilidad natural y la tratabilidad de la madera empleada, la clase de riesgo biológico y la vida útil deseada. También proporciona orientación para establecer si se ha alcanzado un nivel específico de tratamiento. Esta norma británica se aplica únicamente a la madera maciza, incluida la madera laminada encolada. No se aplica a los productos de panel, ya que no se han publicado normas europeas sobre la conservación de estos productos. Esta norma británica no se aplica a los tratamientos considerados de naturaleza reparadora o a aquellos diseñados principalmente para influir en el comportamiento de la madera ante el fuego. NOTA En el Reino Unido, sólo se permiten conservantes aprobados según el Reglamento de Control de Pesticidas de 1986 [2] para el tratamiento de la madera.