Aplicación: Principalmente para prevenir la corrosión de piezas de acero al carbono y de baja aleación que pueden funcionar a temperaturas de hasta 900 F. Este proceso no es adecuado para su uso en piezas de forma compleja donde no se pueden cumplir los requisitos mínimos de espesor de la placa de níquel y en piezas cuya dureza reducirse por debajo de los requisitos del dibujo calentándolo a 640 F.