Esta norma europea fija los métodos para determinar los contenidos de cloruros, de dióxido de carbono y de alcalinos en los cementos. La norma describe los métodos de referencia y, en determinados casos, uno variante que proporciona resultados equivalentes. Si se utilizan otros métodos, es preciso probar que proporcionan resultados equivalentes a los resultados de los métodos de referencia. En caso de litigio, solamente se deben utilizar los métodos de referencia. Esta norma se aplica a los cementos, así como a sus materiales componentes tales como, por ejemplo, el clinker o la escoria de alto horno.